RELACION NO PROGRAMADA

Aunque el colectivo médico no está de acuerdo pues consideran que pierden el contacto con la mujer así como la posibilidad de ofrecer una educación sexual que ayude a prevenir situaciones de riesgo y saber si cuando acude para solicitarla lo hace con excesiva frecuencia, la sonrisa más optimista acompañó a las ministras Jiménez y Aído al anunciar la venta sin receta médica de la pastilla del día después utilizada por más de 500.000 mujeres al año (de momento Madrid Salud se niega); personalmente y me temo que no soy el único, me parece que la iniciativa resulta descaradamente machista.

En estos temas como en todos, debemos empezar por el principio; en un país donde el 22,5% de las mujeres confiesa mantener relaciones sexuales sin protección porque sus compañeros se niegan a usar preservativos, a la gran mayoría de los adolescentes nadie les dice la verdad y para eso tanto comité y tanto experto con una nómina que le haría palidecer. Alguien debe explicarles que la tal pastilla es sólo un remedio de emergencia no un método anticonceptivo, amén de ser un “chute” de hormonas que fácilmente le alterará su ciclo menstrual ya que actúa inhibiendo la ovulación e impidiendo la fertilización llegando a provocar incluso una fuerte hemorragia si las cosas se llegaran a complicar. A los únicos que ha contentado la medida, ha sido a los abortistas que defienden que debe ser ella la que se preocupe por evitar un embarazo no deseado; los chicos no pueden follar más tiempo a ciegas, esto sí que es fundamental en su educación. Que los menores de edad no puedan comprar una cajetilla de tabaco ó pedir una cerveza, pero sí pueden adquirir la píldora sin permiso de los padres, me parece muy propio de este país desorientado.